"Bye Bye American Pie" en el Malba.
La muestra del Malba me resultó por demás interesante no solo por la calidad
de las obras, sino también por la bastedad y variedad de contenido y
expresiones artísticas que iban desde la pintura, la instalación o la fotografía
para desarrollar un punto en común entre las obras de los siete artistas y este
creo que es un gran mérito atribuido al curador.
Me pareció oportuno el orden en que se desarrollaba el recorrido y respecto
a esto voy a anclar mi reflexión en la primera artista que aparece. Me refiero
a la diseñadora gráfica Bárbara Kruger que si bien realmente no fue la que mas
me impactó, creo que pertinente que esté en el comienzo de la muestra.
Considero que es la artista más explícita (quizás la mas consciente de lo que
quería ilustrar) e introductoria para el tema tratado, la decadencia del modelo
norteamericano, la trastienda del "sueño americano", la hipocresía,
la marginalidad hacia las minorías, el consumismo y la alienación, la violencia
física pero también visual; respecto a esta última considero que Kruger la
utiliza para resignificarla y poner a la intemperie todos estos temas. Al
utilizar soportes de gran tamaño y llamativos como podrían ser usados por una
publicidad y cargarlos de un sentido negativo. También toma símbolos de la
cultura norteamericana como ser la bandera o la casa blanca para
desprestigiarlos. No es casual tampoco que utilice la serigrafía como técnica
de impresión para resaltar el tema de la cultura de masas.Creo que el uso de
textos con predominio del rojo superpuesto a fotografía en general en blanco y
negro es lo que hace más evidente el discurso planteado por la artista y lo
interesante de esto es que puede llegar a ser interpretado fácilmente por
cualquier espectador, es decir se apodera de un recurso de la publicidad del
consumismo en masa para resignificarlo, y eso creo que es lo importante y lo
que imagino que pensó el curador a la hora de ubicar esta obra en el primer
espacio del recorrido.